viernes, 15 de marzo de 2013

Prueba Lexus IS-F 2012 - 2013

No se trata de hablar únicamente de los aspectos positivos de un auto en nuestras evaluaciones, pero con algunos ejemplares a veces cuesta trabajo encontrar defectos significativos, no obstante también mencionaremos lo que no nos gustó de vehículo. Precisamente una de las características extrañas' que posee el IS-F, es que a simple vista no deja entrever que se trata de una máquina de potencia pura y espíritu deportivo reprimido bajo una carrocería que proyecta la imagen de un bonito y refinado sedán. Quizá Lexus deba considerar una revisión a la silueta del IS-F para futuras generaciones y añadir algunos trazados más deportivos a su silueta. Esa es la gran ironía y es cuando tenemos que contarle a la gente de qué se trata realmente el IS-F de Lexus.
Está claro que ingenieros y diseñadores de Lexus se propusieron elevar el nivel de refinamiento, prestaciones y desempeño de su gama y esto se hace muy notorio en el IS-F -y en otros modelos también- al ofrecer un producto que reúne esas tres características: potencia salvaje, finas prestaciones y un interior seductor.
La potencia de la que hacemos referencia se traduce nada más y nada menos que a través de un sediento motor V8 de 5.0 litros con doble árbol de levas e inyección directa de combustible. Esta orquestada y explosiva combinación produce 416 caballos de fuerza y 371 libras por pie lineal de torsión. El poderoso motor está conectado a una transmisión de ocho velocidades semiautomática con paletas de cambio montadas en la dirección. El resultado de esta receta es una capacidad de respuesta vibrante y súper rápida en aceleración y un desempeño deportivo que satisface a los más exigentes, y eso que se trata de un cuatro puertas de lujo que parece estar hecho más para la pista que para el tránsito del día a día, aunque tiene los modales perfectos y bien aplomados de un cómodo y sofisticado sedán, muy apropiado para el paseo apacible de la noche tropical o para sortear sin sobresaltos el pesado tráfico rutinario de un día normal de trabajo.
La diversión absoluta ocurre cuando lo manejas en el modo secuencial, metiendo cada cambio de marcha con los 'paddle shifters'. Los cambios los ejecuta con una rapidez de casi una décima de segundo, permitiendo que el conductor controle con mucha precisión el desempeño mientras se sube de revoluciones con un entusiasmo que asusta. Al descender en los cambios para alcanzar más velocidad y control la respuesta también es rápida y se ayuda bastante con lasincronización automática de revoluciones para no perder el impulso. Llama la atención también el sonido delicioso que produce su V8, especialmente al subir abruptamente la velocidad, sale de su pecho un sonoro ronquido que irrumpe en la cabina como una invitación a satisfacer el hambre y sed de velocidad que comunica su máquina. Las ocho velocidades de su transmisión le permiten mantener niveles decentes en la economía de combustible, sobre todo mientras se maneja en condiciones normales sin abusar mucho del acelerador.
Pero hablando de consumo, el IS-F no es precisamente un 'green car'. Sus promedios combinados se han calculado en 18 millas por galón, producto de un consumo equivalente a 16 mpg en la ciudad y aproximadamente 23 mpg en el tráfico de autopista.
La suspensión del Lexus IS-F se siente firme, con sabor deportivo pero cabe reiterar aquí que es lo suficientemente civilizado para cualquier condición normal de carretera. La dirección es muy precisa y bastante comunicativa, lo que contribuye a una excelente dinámica de manejo.
Las ayudas electrónicas de manejo, a las que Lexus denomina VDIM para el control de tracción y estabilidad, permiten manejar el auto con cierta soltura, no son tan 'entrometidas' como en otros modelos y también se pueden apagar con tan solo oprimir un botón, obviamente son elementos de seguridad que aconsejamos mantener activos como regla general.
El frenado es impecable gracias a la brillante combinación de los Brembo de 360mm y seis pistones en el eje delantero y de 345mm con dos pistones en el de atrás. En materia de seguridad el IIHS (Insurance Institute for Highway Safety) le ha otorgado a la línea IS las mejores calificaciones para choque frontal y lateral.
En el interior se destacan los materiales de alta calidad y finos acabados, los asientos deportivos delanteros son lo suficientemente ergonómicos para brindar comodidad y a su vez sostener al conductor en su lugar durante maniobras más agresivas, esto se complementa con una notable estabilidad que limita el deslizamiento del cuerpo hacia los costados en curvas pronunciadas. Su interface de instrumentos, controles y navegación ofrece altos niveles de tecnología. El espacio interior puede verse un poco comprometido en la parte trasera, especialmente para los ocupantes más altos. También el espacio para las piernas no es el más generoso y de igual forma la cajuela de carga solo ofrece 13.3 pies cúbicos de espacio.
El precio básico sugerido por Lexus para el IS-F es de $61,600. La unidad probada cuesta $66.405.

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